No sabe como llegó hasta allí, el salón donde cursó segundo año, donde la reciben sus compañeros entre besos y risas.
Son hermosos esos momentos de la niñez pero, de repente, vuelve a la realidad de una habitación en penumbras, llena del humo de las drogas que no ha parado de consumir y que la consumen a ella.
Sobre su cuerpo, entre sus piernas, un hombre termina por eyacular y ella parece no estar enterada; cuando éste se marcha le tira unos billetes sobre la cama en desorden.
El cuarto es una mugre pero no le importa, ha hecho el dinero para comprarse sus drogas y es suficiente.
Patrícia, há um selo comemorativo dos 499 seguidores do artes e escritas esperando por você! Um abraço, Yayá.
ResponderEliminarGracias Yayá por tenerme en cuenta!!
EliminarYa pasé a buscarlo y lucen aquí!!
besos!!
Triste vida, sumirse en ese infierno por unos pocos instantes de felicidad. El precio es demasiado alto.
ResponderEliminarBeso
Hola GaMyr, gracias por pasar y comentar. Cierto lo que dices, lamentablemente pasa todos los días!!!
EliminarUn abrazo!!
Triste...muy triste tener que regresar a la niñez para tener un momento de felicidad en la vida....pero hay gente que no aprendió a caminar si no que a dar tumbos en cada paso que da...fuerte el relato....pero a la vez...real....besoooss
ResponderEliminarHola Marita, que alegría saber de tí!!
EliminarLamentablemente, historias como estas se ven ó se conocen todos los días!!
Es crudo pero como vos decis: demasiado real!!
Un beso grandote!!
Hola querida!, esperaré ansiosamente a k t animes a participar en mi concurso/sorteo para celebrar el primera añito del club y a que me envies el email con los datos solicitados.
ResponderEliminarSaludos mi niña y gracias x felicitarme y ser parte del club!, muak!
¡Y feliz comienzo d semana! >.<